domingo, 30 de diciembre de 2012

Cuestión de tacones.


Sobre sus tacones pisa fuerte y segura, levantando las calles. En el trabajo sabe que materializar a la perfección: inteligencia, ambición y convicción, son la clave de su éxito.

Cuando llega a casa, está Él, y las cosas cambian, baja de sus tacones callando lo que lleva esperando desde hace 5 años, un giro de 180 grados que nunca acontece, solo se deja intuir tras cada discusión y posterior portazo… 

Había llegado al límite de su paciencia pero por enésima vez lo aceptará con "carita" de cordero.

¿Era eso lo que ella quería?

Él piensa que con flores, un puñado de palabras bien preparadas, y esas caricias que desembocaban en la cama el único terreno en el que si se entendían, se arreglaba todo… Pero no sabe que pronto esa puerta no se volverá a abrirse, y los tacones retumbaran por todas partes.

2 comentarios: